lunes, 20 de junio de 2022

EDITORIAL TANIMARA 46: UNA LECTURA A LAS ELECCIONES DEL 29 DE MAYO Una vez más, asistimos los colombianos(as) a la cita electoral para la elección de Presidencia y Vicepresidencia de la nación, para el periodo 2022-2026. En el exterior, cerca de un millón de compatriotas estuvieron sufragando en 67 países de la Comunidad internacional desde el lunes, 23 de mayo y hasta el día domingo 29, día de las votaciones en Colombia, donde según la Registraduría Nacional, 38 millones de personas estábamos habilitadas para sufragar. Con un potencial electoral total de 39 millones de connacionales, votamos 20.8 millones, un abstencionismo del 46.7% (18.2 millones) y 366.000 votos en blanco. Acudimos a votar no sólo con el deber y el derecho a elegir, sino también con la urgente necesidad de cambiar la politiquería y la corrupción, pasar la página de éste pésimo gobierno de Iván Duque, mandatario cuya campaña, desde el momento de su triunfo, fue denunciada por fraude y compra-venta de votos (adulteración de formularios, financiación con dineros del “Ñeñe” Hernández, las denuncias de Aida Merlano, etc.) Luego, la Pandemia Covid19 traería nefastas consecuencias socioeconómicas, estallidos sociales con visos insurreccionales, la violenta e ilegal represión contra las protestas, el resurgimiento de todo tipo de violencias en el país: desde las bandas delincuenciales, el neo-paramilitarismo (Águilas Negras y Autodefensas Gaitanistas), Clanes del Narcotráfico como el del Golfo y Úsuga (AGC), disidencias Farc y el accionar del ELN. El Acuerdo de Paz hecho trizas, excombatientes guerrilleros y Líderes sociales asesinados, un “Paro armado” del Narcotráfico a escasos días de elecciones ante un Gobierno ausente, perdido, que no atinaba con ninguna iniciativa. Conclusión: 76% de impopularidad con el gobierno Duque y, de paso, el inicio de la decadencia de Álvaro Uribe Vélez, la desconfianza con sus designados, caso de Iván Zuluaga y hasta del propio partido de gobierno. En ese contexto y con la inflación más alta de los últimos 21 años, la moneda más devaluada de la historia, los entes de control amarrados al querer del Ejecutivo y una corrupción rampante (lo último fueron los $ 70.000 millones birlados, que iban a ser destinados al internet de los niños en sus apartadas escuelas) era apenas obvio y lógico que, todas las encuestas y sondeos realizados por Invamer, Cifras & Conceptos, Datexco, Centro Nal. De Consultorías y los Medios Caracol, Semana, Blu Radio, etc., mostraran el liderazgo de candidatos de Partidos y Movimientos alternativos (Centro e Izquierda democrática) y la intención de voto por el candidato del Pacto Histórico. Ello quedó demostrado el pasado 13 de marzo en las elecciones de Senado y Cámara y las consultas para candidatos a presidencia. El pueblo pasó factura tanto acá en el territorio nacional como en el exterior. (De rebote, “Fico” pagó las consecuencias de recibir el apoyo del desprestigiado Uribismo). Por ahora, conocidos los resultados, iremos a una 2ª. Vuelta entre los candidatos Gustavo Petro, del Pacto Histórico y ganador con 8.527.768 votos (40,3%) y Rodolfo Hernández, de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, quien obtuvo el segundo lugar con 5.953.209 votos (28.1%). Y la definición no debe entenderse como se ha dicho, “entre el comunismo y la democracia”. No! La definición es entre propuestas por el cambio, hacia un país en paz y con justicia social, contra la corrupción, la guerra y la politiquería.

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